La práctica del yoga ofrece una amplia gama de posturas beneficiosas para el cuerpo y la mente. Una de las posturas más básicas y efectivas para el cuidado de la espalda es la conocida como Postura del Gato-Vaca. Esta secuencia suave y fluida ayuda a fortalecer y aliviar la columna vertebral, al tiempo que proporciona una serie de beneficios para nuestra vida cotidiana. En este artículo, exploraremos los aspectos clave de la Postura del Gato-Vaca y cómo su práctica regular puede mejorar nuestra salud y bienestar.
La Postura del Gato-Vaca es una combinación de dos movimientos que se realizan en una secuencia continua. Comienza en una posición de cuatro patas, con las manos debajo de los hombros y las rodillas debajo de las caderas.

Pasos para realizar la secuencia:
- Gato (Marjaryasana): Inhala profundamente mientras arqueas la columna vertebral hacia arriba, llevando la barbilla hacia el pecho y dejando caer la cabeza. Imagina que estás empujando el ombligo hacia el techo. Mantén los hombros y las manos en su lugar.
- Vaca (Bitilasana): Exhala suavemente mientras dejas caer la barriga hacia el suelo, levantando la cabeza y el trasero hacia el techo. Mira hacia adelante sin forzar el cuello.
Beneficios para la espalda
La Postura del Gato-Vaca es conocida por aliviar el dolor de espalda, ya que estira suavemente los músculos y los ligamentos de la columna vertebral. La combinación de movimiento y respiración consciente ayuda a liberar la tensión y a reducir el dolor en la espalda.
Además, al realizar la secuencia del Gato-Vaca, se estimula la circulación sanguínea en la columna vertebral y los músculos adyacentes. Esto proporciona nutrientes y oxígeno a las células, promoviendo la curación y el bienestar general.
